Qué debe saber sobre la retinopatía diabética
El tratamiento de la retinopatía diabética depende de varios factores, incluida la gravedad de la afección y cómo ha respondido a tratamientos anteriores.
En las primeras etapas, el médico puede decidir vigilar de cerca los ojos de la persona sin intervenir. Este enfoque se conoce como espera vigilante.
En algunos casos, una persona puede necesitar un examen ocular dilatado completo con una frecuencia de 2 a 4 meses.
Las personas tendrán que trabajar con su médico para controlar la diabetes. Un buen control del azúcar en la sangre puede retrasar significativamente el desarrollo de la retinopatía diabética.
En la mayoría de los casos de retinopatía diabética avanzada, la persona requerirá tratamiento quirúrgico.
Las siguientes opciones están disponibles:
Tratamiento con láser
La cirugía láser dispersa, o la fotocoagulación panretinal, se lleva a cabo en el consultorio de un médico o en una clínica oftalmológica. Un médico utiliza láseres dirigidos para reducir los vasos sanguíneos en el ojo y sellar las fugas de vasos sanguíneos anormales.
Este tratamiento puede detener o frenar la fuga de sangre y la acumulación de líquido en el ojo. Las personas pueden necesitar más de una sesión.
El procedimiento consiste en que el médico coloque un medicamento anestésico en el ojo y luego apunte un haz de luz fuerte hacia el ojo con un lente especial.
La luz brillante puede picar o sentirse incómoda, y es común experimentar visión borrosa durante el resto del día. Pueden aparecer pequeñas manchas en el campo visual durante unas semanas después del procedimiento.
El tratamiento con láser conlleva ciertos riesgos, como la pérdida de la visión periférica, la visión en color y la visión nocturna. Una persona puede hablar con su médico sobre los beneficios y riesgos relativos de este tratamiento.
Inyecciones
Ciertos medicamentos pueden reducir la hinchazón y minimizar las fugas de los vasos sanguíneos en los ojos. Los medicamentos pueden incluir medicamentos anti-VEGF y corticosteroides.
Las inyecciones en los ojos implican que el médico siga los siguientes pasos:
- colocar un medicamento anestésico en el ojo
- limpiar el ojo para ayudar a prevenir infecciones
- colocar el medicamento en el ojo con una aguja muy pequeña
Las personas pueden necesitar inyecciones regulares, pero con el tiempo, generalmente requieren inyecciones con menos frecuencia.
Cirugía ocular
Si una persona tiene problemas con la retina o el vítreo, puede beneficiarse de una vitrectomía. Este procedimiento consiste en la extracción de parte del vítreo del ojo.
Un cirujano realizará este procedimiento en un hospital bajo anestesia general o monitorizada.
El objetivo es reemplazar el vítreo turbio o la sangre para mejorar la visión y ayudar al médico a encontrar y reparar cualquier fuente de sangrado retiniano.
Después de retirar el vítreo turbio o sanguinolento, el cirujano insertará un líquido o gas transparente en su lugar. El cuerpo absorberá el líquido o gas con el tiempo y creará nuevo vítreo en su lugar.
Después de la cirugía, la persona generalmente necesitará usar un parche en los ojos durante aproximadamente un día y usar gotas para los ojos para reducir la hinchazón y prevenir infecciones.
Si el médico coloca una burbuja de gas en el ojo, la persona tendrá que mantener la cabeza en una posición determinada durante unos días o semanas para asegurarse de que la burbuja permanezca en el lugar correcto. También tendrán que evitar volar y visitar lugares a gran altitud hasta que la burbuja desaparezca.
La cirugía no es una cura para la retinopatía diabética, pero puede detener o retrasar la progresión de los síntomas. La diabetes es una afección a largo plazo, y el daño retiniano subsiguiente y la pérdida de la visión aún pueden ocurrir a pesar del tratamiento.