Articles

Trastorno interno de la rodilla: Causas y cómo tratarlo

El trastorno interno de la rodilla es un término médico que abarca algunas afecciones que afectan el área de la rodilla. Esto puede incluir trastornos articulares, cuerpos sueltos en la articulación de la rodilla, ligamentos dañados y menisco desgarrado, que ocurren solos o en combinación. Los traumatismos externos en la rodilla debidos a deportes como el fútbol americano y el baloncesto, o incluso el uso excesivo crónico, suelen desencadenar un trastorno interno de la rodilla. La afección no incluye osteoartritis de la rodilla y similares.

Los ligamentos que se encuentran en la articulación de la rodilla son tejidos conectivos resistentes que conectan los huesos entre sí. Los dos ligamentos importantes en la rodilla son el LCA (ligamento cruzado anterior) y el LCP (ligamento cruzado posterior). Otra estructura importante que se encuentra en la rodilla se llama menisco. Se asemeja a un disco de goma y ayuda a la articulación de la rodilla a equilibrar el peso corporal total por igual.

¿Cuáles son las causas y los síntomas del trastorno interno de la rodilla?

Las lesiones en la estructura de la rodilla pueden ocurrir a cualquier edad, pero algunas lesiones son más comunes a cierta edad y en ciertos sitios estructurales que otras. Las siguientes son algunas de las causas del trastorno interno de la rodilla:

Actividad física extenuante. Por ejemplo, deportes, exceso de trabajo y accidentes. Estas actividades pueden poner mucha tensión en los ligamentos y otras estructuras de la articulación de la rodilla, lo que lleva a su daño.

parada Repentina mientras se ejecuta. La fuerza necesaria para detenerse abruptamente puede ser suficiente para dañar las estructuras de la rodilla.

Lesión directa en la rodilla. Una causa común de trastorno interno de la rodilla.

lesiones de Ligamentos. Usted es más propenso a sufrir lesiones de ligamentos en ciertos deportes como el rugby y el fútbol americano.

Lesión del ligamento cruzado anterior. Comúnmente ocurre en la gimnasia.

Aterrizar fuertemente en una articulación de rodilla flexionada. Esto puede ejercer una presión excesiva sobre la articulación de la rodilla.

Vejez (más de 60 años). Las personas mayores son más propensas a la alteración interna de la rodilla que las personas más jóvenes.

los Síntomas de trastorno interno de la rodilla pueden incluir:

  • Sentir y / o escuchar una sensación de rotura o desgarro en el momento de la lesión
  • Hinchazón marcada dentro de un par de horas de la lesión
  • La sensación inmediata de inestabilidad

¿Cómo diagnosticar el trastorno interno de la rodilla?

Después de que su médico haya revisado un historial completo de cómo desarrolló el trastorno interno de la rodilla, realizará un examen físico para medir la extensión del daño a través de varios movimientos y gestos. Inicialmente, buscarán cualquier corte, moretón o hinchazón, así como cualquier signo de dislocación o inestabilidad de la articulación de la rodilla.

Una vez que su médico tenga una buena idea de lo que puede ser la lesión, requerirá pruebas de imaginación para obtener una imagen más clara. Esto puede incluir el uso de:

  • Rayos X
  • Tomografía computarizada
  • Artroscopia (con una cámara diminuta para ver el interior de la articulación)
  • Resonancia magnética (la prueba más precisa para ver la estructura de los ligamentos, tendones y meniscos)

¿Cómo tratar el trastorno interno de la rodilla?

La gravedad de la lesión de rodilla a menudo dictará el alcance del tratamiento necesario para cada caso, siendo la cirugía de rodilla el tratamiento definitivo. Es importante seguir los consejos de su médico para prevenir lesiones repetidas y promover la curación. Los siguientes consejos también pueden ayudar con la recuperación de la rodilla:

Mantenga el peso fuera de la articulación de la rodilla. Se puede lograr con el uso de muletas.

Aplicar compresas frías. Puede ayudar a aliviar el dolor y la hinchazón. El hielo se puede usar y aplicar cada dos horas durante 20 minutos a la vez.

Use vendaje de compresión. Puede ayudar a controlar la hinchazón.

Mantenga la rodilla elevada. Ayudará a reducir la hinchazón y promover la circulación sanguínea

Use rodilleras especiales. Para estabilizar y proteger la rodilla lesionada, Tome medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE). Se puede comprar sin receta y puede ayudar con el dolor y la hinchazón. Es importante usarlos con moderación y a discreción de su médico.

Estirar. Puede ayudar a fortalecer la rodilla y acelerar el proceso de curación.

¿Prevenir el trastorno interno de la rodilla?

No siempre es posible prevenir accidentes que puedan causar trastornos internos de la rodilla, pero hay algunas cosas que puede hacer para minimizar las probabilidades de sufrir lesiones:

Mantener fuertes los músculos de las piernas. Se puede lograr mejor a través del estiramiento y el ejercicio.

calentar antes de las actividades. Antes de comenzar cualquier actividad extenuante, es una buena idea estirar las articulaciones para mantener la flexibilidad.

Sigue estirando. Al hacer que el estiramiento sea parte de su rutina diaria, puede aumentar la flexibilidad y mantenerla durante toda la vida.

Corrija su forma y postura. Al realizar movimientos de torsión, tener mala forma puede provocar lesiones.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *