Articles

¿Está Bien Mentir alguna Vez?

A una edad temprana, a muchos de nosotros se nos enseña que decir una mentira es absolutamente malo. Sin embargo, a medida que crecemos, nos exponemos lentamente a pequeñas mentiras «blancas», que nos dicen que eviten que nos enojemos o nos entristezcamos. Incluso a medida que pasamos a la edad adulta, a menudo se dicen mentiras bien intencionadas para proteger a una persona de las críticas o las dificultades adicionales. ¿Pero podemos estar seguros de que decir una mentira es lo correcto?

Por qué decimos mentiras blancas

Como padre, usar mentiras blancas para ayudar a evitar que un niño se sienta molesto es una práctica común y, según la investigación, es socialmente aceptable en muchas culturas. Un padre, por ejemplo, puede decir pequeñas mentiras para evitar que un niño se preocupe por un animal de peluche desaparecido o calmar su miedo a recibir una inyección en el consultorio del médico. A menudo, este acto se percibe como compasivo y se considera una «mentira prosocial», que implica que una persona miente para prevenir el daño a otra persona.

Incluso en la edad adulta, esas mentiras «más pequeñas» a menudo continúan. Muchos adultos pueden sentir que se encuentran en situaciones en las que mentir es la única opción ética. Si una persona te pregunta cómo se ve el día de su boda, por ejemplo, solo hay una respuesta aceptable, a pesar de cuál sea tu opinión honesta. En un entorno de trabajo, lo mismo puede ser cierto cuando se trata de interacciones con su jefe o en situaciones en las que siente la necesidad de evitar la vergüenza o incomodidad de alguien al recibir críticas.

La pregunta entonces es si este tipo de mentira es menos dañina que simplemente ser honesta desde el principio.

Es Mentira Nunca Innegablemente Malo?

Si cada mentira contada pudiera prevenir el daño a otra persona, sin efectos nocivos, la respuesta a esta pregunta sería más clara. Pero en realidad, decirle falsamente a alguien que hizo un trabajo fantástico cuando no lo hizo, o dejar que alguien crea que es un competidor para un ascenso, cuando no lo es, puede resultar en más daño que bien.

Este tipo de mentira — una mentira paternalista — requiere que el engañador haga suposiciones sobre si la mentira es en el mejor interés de la persona que la recibe. Esto resulta en un fuerte resentimiento de las partes engañadas, y en muchos casos, es contraproducente.

Para ayudar a fomentar una mayor honestidad en su vida profesional y personal y evitar la necesidad de mentir, asegúrese de crear entornos en los que se sienta cómodo diciendo la verdad (y ayude a otros a sentir que también pueden hacerlo). Al ser honesto tanto como sea posible, puede crear condiciones en las que los que lo rodean se sientan escuchados y creídos. Esto ayudará a detener el engaño con intención positiva.

Cómo Decidir Cuándo Mentir

Mientras que algunos pueden optar por seguir con la honestidad como la mejor y única política, si elige decir una mentira o sesgar la verdad de alguna manera, considere los siguientes dos factores: El tamaño y la intención de la mentira, son su razón prosocial, paternalista o son puramente engañosos y maliciosos, y las posibles repercusiones si lo atrapan. Si bien puede ser la mejor política, como hemos visto, la verdad no es la única política. Algunas mentiras son necesarias e incluso justificadas.

Incluso si la mentira parece inofensivo en la superficie, es importante sopesar estas consideraciones antes de decidir si es mejor no decir nada. Y recuerde, si es honesto, es más fácil mantener su historia correcta y no tendrá ningún impacto negativo en su salud mental (como sentirse culpable por su engaño).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *